Cuando
se tratan de temas ambientales y sostenibles, la alerta debe ser permanente,
dado el interés depredador de la clase política (izquierda y derecha), para
favorecer sus réditos económicos y burocráticos, y para decir en un principio
que son el cambio pero que resultan siendo lo mismo, miren que el actual gobierno (gobiernillo) de
Gustavo Petro está resultando con actitudes similares al de Álvaro Uribe (no se
podía decir nada que les disgustara); incluso, con la guerra a muerte declarada
contra el Acuerdo de Paz vigente entre el Estado Colombiano y la antigua
guerrilla de las Farc. Ni hablar cuando se trata de proteger Reservas
Ambientales frente a las pretensiones de imponer Bases Militares (así digan que
son simples antenas de detección de naves del narcotráfico), que pueden
realizar daños irreversibles, como en el caso del Parque Nacional Natural “Isla
de Gorgona”, donde se quiere construir una especie de base militar en
cooperación con Estados Unidos, para tareas contra el narcotráfico, cuando ya está
demostrado que un proyecto de estos puede acabar con la fauna y flora nativa de
la isla; pero como el Ministerio del Medio Ambiente está empeñado en defender
la terquedad y el ego del mismo presidente, no se quiere dar cuenta de los
problemas que le puede generar al país, si se quiere pasar por encima sobre la
biodiversidad.
Empezando
por lo que dijo la misma Ministra del Medio Ambiente, Susana Muhamad en
entrevista a la W Radio: “Ha sido un proyecto lleno de mala información. Llamé
a la opinión pública y al Congreso a hacer un debate válido sobre el proyecto
que sí se hará. Han dicho que será una base militar, que tendrá tropas
extranjeras, que se harán grandes obras de infraestructura”. Puede que
tenga razón ya que decidieron suspender el otorgamiento de la Licencia
Ambiental, pero justo se le ocurre decir lo anterior, después, lo que deja
muchas dudas. Y luego sigue con esta perla: “en este momento en la
revisión que llevamos no hemos encontrado una situación que amerite una
suspensión, pero tenemos un montón de cosas que están en análisis”.
Como dicen por ahí, “para que les digo que no, si sí”, una contradicción
abierta y muy preocupante, dado que no hay comunidad humana en la Isla (aunque
pertenece al Municipio Continental de Guapi, en el departamento del Cauca), tan
solo los policías y unas autoridades ambientales que se encuentran cuidando la
misma, y que dependen del mismo gobierno. El Gobierno (gobiernillo) del Cambio
está mostrando su verdadera cara, de querer imponer sus criterios sin importar
lo que piensen los demás.
Sería bueno retomar las palabras de Darío Gonzales Posso
(20/01/2023), publicadas en el sitio web de Indepaz: ““el progreso debe
buscarse sin afectar los recursos naturales (…) el desarrollo no puede ser a
costa de la vida de la gente, de la naturaleza y del bienestar. El desarrollo
es con la gente, es con la naturaleza o no será”. ¿Mantiene Francia Márquez esta
posición? ¿Y el Presidente Gustavo Petro qué dice?””. La misma
Vicepresidenta ha resultado ser una decepción, por cuanto solo está pendiente
de los helicópteros y del todavía inexistente Ministerio de la Igualdad, tan
solo ha resultado ser una figura decorativa. Se suma la denuncia penal que
el Círculo de Pensamiento Ambiental (Cirpa), entabló contra el Procurador Ambiental,
Gustavo Guerrero Ruiz, quien dejó en firme la Licencia Ambiental de este
proyecto en un principio. En el documento de dicha acción judicial se puede
leer lo siguiente: “El Círculo de Pensamiento Ambiental llama la atención
que, no obstante ser la Procuraduría un organismo cuyas funciones
constitucionales son proteger los derechos humanos y defender los intereses
colectivos, en especial el ambiente, el Procurador Ambiental haya omitido
invitar a la sociedad civil y las organizaciones ambientalistas que viene
liderando la defensa de Gorgona como Isla Ciencia y la fragilidad de su Mundo
Marino…”.
Y si esto no es
suficiente para el Gobierno (gobiernillo) Petro, se puede evocar las palabras
de la columna del ExMinistro Manuel Rodríguez Becerra en El Tiempo: “Si el
gobierno del presidente Petro continúa con este proyecto, iría a contrapelo de
sus propósitos de convertir a Colombia en una Potencia Mundial de la Vida y de
transformar radicalmente la política del país sobre el narcotráfico. El
proyecto de la estación de guardacostas en Gorgona pertenece a la vieja
política antidrogas dictada desde la Oficina Internacional de Asistencia
Antinarcóticos de Estados Unidos”. Hay que tener un importante detalle;
este gobierno (gobiernillo) se ha jactado de querer cambiar la política
antidrogas, algo en que las mayorías están de acuerdo, pero aún no ha mostrado
el plan para el mismo, a tal punto de que está dejando muchas dudas frente a un
tema tan delicado como este. La alerta sobre Gorgona sigue, y los
movimientos que hagan las actuales Autoridades Ambientales deben ser vigilados
de cerca, porque en cualquier momento pueden voltear la situación e imponer los
criterios napoleónicos de ese tal Pacto Histórico.
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