Donald Trump (más
conocido como Trumpilio) se ha caracterizado por ser una persona de rencores
eternos. Lo ha demostrado en su primera como segunda presidencia de Estados
Unidos, que ganó gracias a ciertos aportantes poderosos que llegaron a su
campaña (caso Elon Musk, ahora uno de sus peores opositores) ¸ apoyado por
el ala más radical del Partido Republicano, que predica la moral y la religión
pero que a su vez se entrega a los pecados más escandalosos de la clase social
estadounidense. El MAGA (Make America Great Again) es solo una plataforma para
imponer la visión mezquina e intolerante de un excéntrico millonario, que al
igual que Uribe y Petro, le gusta ser el centro de atención de todo el mundo,
por lo que dice, por lo que quiere imponer y por los escándalos en que se ve
involucrado. Su índice de popularidad ha disminuido drásticamente a lo largo de
los cuatro meses y medio que tiene su mandato; y que lo más probable, le pase
cuenta de cobro en las elecciones de mitaca de noviembre de 2026. No es
cuestión de reprocharle a quienes votaron por él en noviembre de 2024, sino
buscar estrategias para enfrentar su egolatría mezclada con la administración
pública de la primera potencia mundial. Pensar que quiere quedarse más allá del
20 de enero de 2029.
Entre todas las
peleas que ha declarado y cazado (inmigrantes latinos, mujeres, población
LGBTIQ+, partido demócrata, Canadá, Unión Europea, etc.), se destaca una muy
particular: el recorte de fondos y la campaña de desprestigio que ha emprendido
contra la Universidad de Harvard, sin lugar a dudas, la más prestigiosa de la
tierra del Tío Sam. ¿Porqué? Aparentemente, tiene muchos estudiantes
extranjeros, algo que no le agrada al esposo de Melania; aunque dicen que en el
Alma Mater no admitieron a alguien cercano al mono. La Universidad de
Harvard es una de las más grandes del mundo, tiene más dinero y poder que
varios países del tercer mundo, allá es donde todo el mundo quisiera estudiar
su carrera de pregrado y posgrado; incluso, tiene muchos convenios para
realizar estudios a través del internet, alguien se puede conectar desde
cualquier lugar del mundo. Es tan grande su influencia que de varios estudios
hechos allá, se han hecho más del 75% de los Planes de Desarrollo de todos los
países, incluida Colombia. Se encuentra localizada en Massachussets, un estado
históricamente demócrata, cuna del Clan Kennedy (el Secretario de Salud de
Trumpilio es el Excéntrico Bob Kennedy Junior).
¿Por qué de esta
guerra absurda y miserable? Según Trumpilio, la Universidad de Harvard enseña
cosas estúpidas y peligrosas, como la solidaridad con Palestina frente a la
matanza que Israel está haciendo sobre ella, tener una posición crítica frente
a la invasión Rusa contra Ucrania, tener una diversidad de ideas políticas (que
van desde la izquierda hasta la derecha, procurando no caer en los
extremismos), y que allá un alto flujo de estudiantes y docentes extranjeros
trabajando en ella. Se le debe recordar al Papá de Barron Trump, que toda
universidad, independiente de su tamaño, ubicación, poderío económico y formas
de trabajo, son centros de educación y debate libre, basado en una primicia: LA
EDUCACIÓN ES UN DERECHO UNIVERSAL, punto. No solo es dictar clases y
revisar las tareas y los trabajos, también se debe dar espacio al análisis de
la situación mundial para hacer una toma de decisiones adecuada, justa y que
satisfaga las necesidades básicas del planeta. Esto podría extenderse a otros
Centros Educativos, no solo en Estados Unidos, donde la popularidad del otrora
Director de “Miss Universo” se encuentra por el suelo por el extremismo que
predica, tanto de palabra como de acción; la Educación Profesional no debe
alinearse con doctrinas políticas.
¿Cómo ha sido la
respuesta del Plantel Educativo? Frente a las Agresiones por parte de Trumpilio,
el Rector del Alma Mater, Alan Garber ha dicho lo siguiente (BBC): "Ningún gobierno, sin importar el
partido que esté en el poder, debe dictar lo que pueden enseñar las
universidades privadas".
Ahora, Trumpilio no solo le ha ido recortando fondos de ayuda, también le está
cancelando las visas a los estudiantes extranjeros, le ha eliminado exenciones
tributarias, lo que indicaría que en cualquier momento podría ordenar la
militarización (lo que es realmente peligroso). Harvard tendría la ventaja de
que gracias a su poderío económico y político puede resistir aunque con altos
costos, como lo afirma Steven Bloom, Vicepresidente Adjunto de Relaciones
Gubernamentales del Consejo Estadounidense sobre la Educación (BBC): "Eso
sería aún más grave. Las instituciones de educación superior no pagan impuestos
sobre la renta, ni sobre propiedades, y además los donantes reciben deducciones
fiscales, lo que incentiva las donaciones. Perder esa exención sería una señal
de advertencia para todo el sistema universitario y tendría un efecto
paralizador". Esto sería de suma gravedad, ya que otros Líderes
Ególatras del Planeta Tierra podrían hacer lo mismo, incluyendo uno muy cercano
a esta República Tropical.
PD: Esa pelea Trump vs Musk, traerá
mucha tela por cortar, y muchas cabezas por rodar.
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