MINISTRA SUSANA

 

Comienza el Mandato Presidencial de Gustavo Francisco Petro Urrego y Francia Márquez Mina, en medio de la algarabía de la izquierda por haber logrado el poder mediante las urnas, la rabia de la derecha y el escepticismo del centro, por todas las alianzas políticas con partidos tradicionales para repartir la torta burocrática. A nivel internacional no se ha quedado atrás, ya que es un hecho de que antes de culminar el presente año, se reanudarán relaciones con Venezuela (así no sea lo más recomendable), el silencio de los demócratas en EEUU y las talanqueras de los republicanos (¿cierto Senador Ted Cruz?). Es un hecho de que Colombia, un país de derecha y conservador pase a manos de una izquierda que dice ser progresista aunque hace negocios con la derecha, estará en la mira internacional, y más si se da el triunfo de Lula da Silva en Brasil en las elecciones de octubre próximo, ya que se formaría un eje de centro – izquierda poderoso en América Latina (Brasil, México, Colombia, Chile, Argentina, Perú, Bolivia), lo que haría girar las relaciones de EEUU y la Unión Europea, no solo a nivel diplomático, también comercial y migratorio. No se menciona a Cuba, Nicaragua y Venezuela, ya que no están en su mejor momento internacional.

 

El Pacto Histórico, movimiento que llevó a Gustavo y Francia al poder, ha hablado mucho del Medio Ambiente y el Desarrollo Sostenible, así los antecedentes de administraciones locales no le favorezcan (ejemplo, la Bogotá Inhumana y Antiambiental de Petro entre 2012 y 2015). Por lo anterior, es necesario establecer una vigilancia estricta a esta administración, evocando el dicho del ExRepresentante a la Cámara Mauricio Toro: “nos tocó a los ciudadanos volvernos políticos”. Como ya se sabe el nombre de la nueva Ministra del Medio Ambiente, Susana Muhamad (ExSecretaria de Ambiente durante la Administración Distrital de Petro), y ha dado puntadas de lo que será su trabajo, se hace necesario hacer observaciones y sugerencias, para que se aplique el dicho “ojalá al Gobierno Entrante le vaya bien, para que a Colombia le vaya bien”, puesto que ha expuesto ideas sobre temas específicos, como el Fracking en la Industria de Hidrocarburos, así como el Glifosato en la Erradicación de cultivos ilícitos. El nuevo gobierno, en un afán de hacer presencia de una vez ha señalado un sinnúmero de compromisos, que pueden ser posibles, pero en un mediano y largo plazo, que incluso, no alcanzaría a lograrse en el cuatrienio, por eso, se hacen algunas anotaciones.

 

Primero, el Glifosato; ese nefasto químico que se ha utilizado para erradicar cultivos ilícitos (Colombia, único caso en el mundo, absurdo), pero que también se lleva por delante los cultivos legales, flora, fauna y la humanidad, algo que la derecha nacional e internacional no ha querido entender. Esto ha manifestado la Ministra Susana sobre el tema (El País – Cali): “Tampoco habrá glifosato, trabajaremos en la sustitución de cultivos ilícitos a través de la reforma agraria donde se busca cumplirle al campesinado con una economía forestal sin generar esos conflictos que tenemos hoy”. Sin lugar a dudas, es la mejor decisión que se ha tomado en esta materia, así no guste en el ámbito internacional y que se insista en presionar indebidamente para retornar a esas aspersiones aéreas. Si acaso se sugeriría un detalle; ceñirse a lo que contempla el Acuerdo de Paz suscrito entre el Estado Colombiano y la antigua guerrilla de las Farc, donde incluso se hacen alusiones a este desagradable químico. Basta con mirar que durante el gobierno (desgobierno) de Uribe en Cuerpo Ajeno, perdón, Duque; se quiso imponer la aspersión aérea con este químico, pero las comunidades y los entes judiciales tuvieron que manifestarse en contra para evitar una catástrofe ambiental.

 

El otro tema importante es el Fracking en la Industria de Hidrocarburos, que, si bien apenas está en estudio, ya se ha demostrado sus nefastas consecuencias sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo Sostenible, así produzca ronchas en el gremio fósil y en cierta dirigencia política. Esto dijo la Ministra Susana sobre el tema (Portafolio): "Buscamos el cierre del fracking. Creemos que ir a buscar los últimos remanentes de gas genera más perjuicio que beneficio, cuando debemos acelerar una transición energética responsable pero que también sea una oportunidad productiva para el país. Además, no va con la vocación de los territorios donde quieren hacer ese fracking". Muchos dirán que el autor de la presente columna se opondría radicalmente a este asunto, pero es todo lo contrario, ya que parte de una realidad; el cambio climático y la llegada de energías limpias, hacen que las fósiles estén cediendo terreno y, por ende, no se justificaría la llegada de un nuevo método no convencional de extracción de hidrocarburos, que no se ha podido comprobar sus beneficios, así como no se han hecho las suficientes consultas con las comunidades posiblemente afectadas. Solo se haría una sugerencia: como éste es el lanzamiento de transición hacia las energías más limpias, debe hacerse de manera organizada y planificada, para evitar un descuadre en los ingresos económicos del país por exportaciones, ya que la principal fuente sigue siendo los hidrocarburos.