Colombia parece
resignada a vivir en medio de la violencia y la humillación, como si tuviese
una Conciencia Masoquista, en donde no se puede debatir con argumentos sino con
bala; donde al más vivo se le aplaude y al menos vivo se le borra del mapa, ser
de centro (tibio) es un crimen de lesa humanidad, la plata da estatus social
para “usted no sabe quien soy yo” y el estrato mil quiere dominar el panorama
en uno de los países más desiguales del mundo. Es una tristeza que luego de
firmarse el Acuerdo de Paz, el de Verdad, entre el Estado Colombiano (en cabeza
del entonces Presidente Juan Manuel Santos) y la antigua guerrilla de las Farc
(en cabeza del ahora Senador Rodrigo Londoño), las dos administraciones
siguientes (la Falsa Economía Naranja y la Corrupta Etnia Cósmica) se hayan
dedicado a reconstruir una espiral de violencia que no se veía desde hace más
de 30 años, porque le dio asco y cobardía a Iván Duque de cumplir el Acuerdo de
Paz, y a Gustavo Petro de ponerle una lápida con el pseudónimo de “Paz Total”.
Para muestra, se traen los siguientes ejemplos de los últimos días.
Primero, magnicidio
del Senador y Precandidato Presidencial, Miguel Uribe Turbay. Desde hacía más
de 35 años que no se veía en el país una infamia así; un candidato quien estaba
en un acto público de campaña (independiente de si ya era tiempo o no), recibió
dos disparos de pistola (uno en la cabeza y otro en una pierna). Tras
permanecer más de dos meses en la Fundación Santafé (Unidad de Cuidados
Intensivos), falleció el pasado once de agosto. Toca recordar que Miguel
Uribe Turbay es hijo de la Periodista Diana Turbay, asesinada por hombres al
servicio del narcotraficante Pablo Emilio Escobar Gaviria. Como si no fuese
suficiente toda la polémica que se había generado alrededor, en plena cámara
ardiente en el Congreso de la República, se leyese un peligroso mensaje
violento del Encarcelado Expresidente Álvaro Uribe Vélez, a manera de fomentar
la guerra para dizque ganar las elecciones legislativas y ejecutivas del año
entrante. Ahora, la respuesta del Gobierno (Desgobierno) Nacional quedó al
mismo nivel; el otrora Jefe de Gabinete y designado Embajador en Brasil,
Alfredo Saade, normalizó el magnicidio como si fuese un accidente en bicicleta.
Luego, el Ministro del Interior y Presidente de Facto, Armando Benedetti, dijo
que ningún integrante del gobierno había asistido por una supuesta decisión de
la familia de Miguel Uribe, algo que no está verificado aún.
Pero como las cosas
siguen su nefasto curso; al Gobierno (Desgobierno) Nacional le dio por armar
un conflicto con Perú, por un islote en el Río Amazonas, y lo peor; su
candidato rascaespaldas, Daniel Quintero Calle alias “Quinterín” hizo una
incursión ilegal en ese islote de jurisdicción peruana con una bandera
colombiana y apenas vio que las autoridades de allá iban a indagar sobre esa
acción, se fue cobardemente en una lancha. ¿No se asemeja esto al bombardeo
que ordenó Uribe en 2008, contra territorio ecuatoriano para dar de baja a Raúl
Reyes? Ambos sucesos ilegales y con muchos problemas para el país. Sacaron por
decreto (ilegal, según altos conceptos jurídicos) la nefasta Reforma a la
Salud, como que el gobierno le tiene miedo a pasarla por el congreso porque parece
no tener ambiente favorable. Ni hablar de una nueva Reforma Tributaria (Ley de
Financiamiento) que no se necesita, pero como suspendieron la Regla Fiscal,
entonces debe haber más dinero para burocracia, corbatas y corrupción. Y lo
peor; uno de los mayores cerebros del Escándalo de la UNGRD, alias Carlos Ramón
González se voló para Nicaragua, y con la complicidad de funcionarios
diplomáticos, logró residencia allá para huir de los líos judiciales.
Ni hablar del
desplante del Gobierno (Desgobierno) Nacional a la ANDI al no asistir al
Congreso Anual en Cartagena, donde Quinterín hizo otro escándalo simplemente
para hacerse notar como un Patán y Arrogante, un Ferrocarril Parado (uno de los
apodos que tenía el Profesor Jirafales, en el Chavo del Ocho). Pero el Uribismo
(mal llamado oposición) no se queda atrás en temas de escándalos; el Aboganster
Diego Cadena fue declarado culpable en el caso de soborno que tiene encerrado a
Carnitas y Huesitos en su finca, en Rionegro (Antioquia). Los dos extremos
se parecen cada vez; la hostilidad hacia la prensa y la oposición por parte de
“Colombia, Potencia de la Vida” se asemeja a la de “Seguridad Democrática”, la
mesianización de Petro por parte de sus bodegas es un caso muy similar a la de
Uribe, les fascina el todo vale y responden con cinismo y anticolombianismo
calcado. Por lo anterior, es que en las elecciones del año entrante, se
debe tener claro que los extremos no son los más recomendables, mientras uno se
mantiene en el poder (Petrismo) a punta de mermeladas y desfalcos, el otro (Uribismo)
quiere imponer “Camándula y Plomo” para apoderarse eternamente de Colombia. Se
necesita un poco de tibieza, equilibrio y centro, para que Colombia no siga
siendo un “País Demente”.