martes, 30 de enero de 2024

INCENDIOS

 

Colombia arranca muy mal en materia ambiental el 2024, con incendios forestales, la mayoría provocados por manos criminales, como si el Cambio Climático quisiese aportar lo suyo para desestabilizar más de lo que está, el horizonte del país. Si bien es el momento de que la nación esté unida, es muy difícil por cuanto el supuesto gobierno de Petro y la supuesta oposición (repartida en migajas entre el uribismo, vargasllerismo y peñalosismo); no dejan hacer nada ni quieren hacer algo positivo (como, palabras más, palabras menos, lo afirma Claudia López, ExAcaldesa de Bogotá). Desde luego, las temperaturas han aumentado, a tal punto de que en Bogotá es normal marcar hasta 25 grados centígrados, así como unos solazos que han hecho aumentar la venta de protectores y bloqueadores solares; en Cundinamarca (sobre las márgenes del río Magdalena), se han registrado datos de hasta 40 grados centígrados, lo que es absurdo, pero se debe tener en cuenta de que en este país del sagrado corazón de Jesús, la Conciencia Ambiental no es un recurso electorero, luego es desechada. Sobre todo, que tres casos emblemáticos han sido los más llamativos.

 

El primero tiene que ver con los cerros orientales en Bogotá. Se han presentado incendio a lo largo y ancho de los mismos, donde si tiene razón la Ministra de Ambiente (Susana Muhamad), se han visto manos criminales y garrafas de gasolina que han hecho que la calidad del aire se vea empobrecida, y ya sea necesario, recurrir con más frecuencia al tapabocas, similar a las épocas duras de la pandemia. Dos casos han llamado la atención en los últimos días: el Cerro El Cable, uno de los más altos del Distrito Capital, ya que allá se encuentran ubicados las antenas de Medios de Comunicación y es una de las zonas más custodiadas por seguridad. El incendio, que fue provocado criminalmente, duró varios días en ser controlado, y su humareda aún ronda los cielos de la Atenas Suramericana, y sus aromas aún siguen perjudicando las zonas de vivienda orientales. El otro, tiene que ver con el Sendero de la Quebrada las Delicias, un corredor de ecoturismo que es visitado por miles de personas todos los días, de espectáculos naturales difíciles de describir; es una lástima que las llamas le hayan hecho un daño tenaz, si bien está totalmente extinguido el fuego, tardará mucho tiempo en ser recuperado. Vale la pena destacar el trabajo coordinado por la Administración Distrital, Autoridades y Bomberos; la unión hace la fuerza y la sensatez para enfrentar problemas como este.

 

El segundo caso tiene que ver con el Parque Nacional Natural Santurbán y más concretamente el Páramo de Berlín. Una de las mayores reservas de Frailejones del mundo, se vio terriblemente afectada por una serie de incendios, en su mayoría actos criminales que fueron grabados en videos y viralizados a través de las diferentes redes sociales. Cientos de hectáreas se vieron afectadas y frailejones de cientos de años que se encontraban presentes, fueron arrasados por las llamas, y para recuperar totalmente esta área, se necesitarán más de cien años, así ya se puedan contar con matas de reserva, que fueron producidas en criaderos especiales. Lo más triste de este caso, es que no se vio un contacto fluido entre las autoridades locales y el gobierno nacional, además, queda un interrogante; ¿un incendio en una zona que ha sido apetecida por la minería a gran escala, tanto legal como ilegal? En cuanto a la comunicación de entidades, es difícil pedirle sensatez tanto al Gobierno Petro como a la Gobernación de Juvenal Díaz Mateus, y la Alcaldía de Bucaramanga en cabeza de Jaime Andrés Beltrán. Aunque ya el fuego fue prácticamente extinguido, se dio el primer vistazo de lo que serán las relaciones tensas entre el gobierno nacional y los gobiernos locales hasta el siete de agosto de 2026, se supone.

 

El tercer caso tiene que ver con el Páramo de las Hermosas, declarada Reserva Natural y ubicada en la Cordillera Central (entre los departamentos de Valle del Cauca y Tolima); un sector que en épocas pasadas fue zona de desplazamiento y parqueo de grupos ilegales con fines de narcotráfico. Cientos de hectáreas fueron calcinadas por el fuego (falta por establecer si hubo manos criminales por ahí), y también tardará varios años, incluso un siglo para ser recuperado totalmente. El trabajo de extinción del fuego fue realizado en su mayoría por los Gobiernos locales, en cabeza de las gobernaciones del Tolima y del Valle del Cauca, porque del Gobierno Nacional no se vio mayor cosa, lamentablemente; porque si bien la Ministra de Ambiente ha estado muy atenta al tema; al Director General de Bomberos, por no estar de acuerdo con ciertas directrices del Gobierno Petro, lo echaron inmisericordemente. Y, por otro lado, la Unidad Nacional de Gestión de Riesgos y Desastres (UNGRD), que debió apersonarse de toda esta problemática desde un principio, está acéfala ya que Olmedo (la ficha politiquera de Julián Bedoya), su Director, no sabe nada en esta materia y ya fue suspendido por la Contraloría General de la República, por casos de corrupción.

 

PD: el Ministerio de Salud se encuentra en manos, de alguien que afirma que las vacunas contra el Covid19 tienen microchips de espionaje, se ha mostrado tibia frente a la pérdida por desuso de un millón de estas dosis. Coincidencias.

martes, 23 de enero de 2024

VIDA CONTAMINANTE

 

Todos los gobiernos, electos democráticamente o no, tienen derecho a defenderse, y exponer sus buenas acciones (aunque en su mayoría son mentiras), es casi un derecho universal. Lo ha hecho Donald Trump con su red social en aras de hacerse la víctima para las elecciones de noviembre del presente año, Chávez y Maduro con su Telesur (que ya casi ni truena ni suena), los presidentes del PRI en México con los culebrones de Televisa, Hitler, Mussolini, Stalin; en Colombia Uribe hizo sus mentiras supuestas verdades en los Consejos Comunales (incluyendo la presentación de Eudalio Díaz, el ExAlcalde de El Roble (Sucre), quien más tarde fue asesinado y en dicho suceso se vio involucrado el ExGobernador de Sucre y ExParamilitar Salvador Arana. Se podría seguir con muchos ejemplos, incluso los programas europeos de protocolos monárquicos, donde alaban a los reyes y reinas que aún existen allá, también con mentiras. Ni hablar del diario Granma de los Castro en Cuba, la China de Mao. Pero en Colombia hoy en día, ya se está hablando de un supuesto periódico mensual que está produciendo el Gobierno Petro bajo un contrato de dudosa reputación por $700 millones de peso, que dicen, serviría para promocionar una peligrosa reelección del mandatario en 2026, dizque llamado Vida; como si no les sirviese RTVC bajo la dictadura de Hollman Morris, porque Nórida Rodríguez solo parece una figura decorativa.

 

Ese tal periódico Vida, el cual ya empezó a circular por ahí, se asemeja al que sacaron hace unos años bajo la Bogotá Inhumana, perdón, Humana del ExAlcalde Gustavo Francisco Petro Urrego, donde se decía que iba a haber Metro para la capital, lo cual ha sido una mentira; si acaso las obras van en un 30% de la primera línea, y eso, que el Gobierno Nacional del mismo Petro quiere sabotearla, algo similar a lo que ha pasado con el Oleoducto Caño Limón – Coveñas. Es tan solo un adulador del Ego nefasto que se manda ese tal Presidente de la República, donde los editoriales, reportajes e informes, solo sirven para mesianizar al Ególatra esposo de Doña Verónica (quien viaja mucho), y promover su peligrosa reelección en 2026, ya que no han vuelto a surgir liderazgos dentro del Pacto Histórico, que hoy en día, más bien parece un Show de Laura Bozzo (incluyendo desgraciados, desgraciadas, cachetadas, trompadas, escupitajos, madrazos, etc.). Es inaceptable que el gobierno pretenda autopromocionarse con falsa información o incompleta, con agresiones a quienes no están de acuerdo con su modo de hacer (igualito a Carnitas y Huesitos).

 

No había terminado de inaugurarse este periódico Vida, cuando ya se le habían detectado unos datos falsos por ahí. El martes 16 de enero, en su primera publicación, bajo el titular "¡Tierras para la paz!”, se habla de una supuesta adquisición de más de 230 mil hectáreas de tierras en el año anterior, para adjudicarlas a familias campesinas, así como la formalización de un millón 741 mil hectáreas con entregas de sus títulos respectivos a lo ancho y largo del país. Pero según dos informativos del país (La Silla Vacía y Revista Alternativa), serían falsos, ya que según la Ministra de Agricultura, Jennifer Mojica, en 2023 solo se compraron 100 mil hectáreas para la adjudicación (menos de la mitad de lo que dicen), ni siquiera, se han adjudicado 25 mil. En cuanto a la formalización, este es el párrafo de la Revista Alternativa: Según el Ministerio de Agricultura, hasta el 22 de diciembre de 2023, se formalizaron 451.459 hectáreas, mientras que la Agencia Nacional de Tierras (ANT) reporta 804.771 hectáreas formalizadas hasta el 9 de enero de 2024”. Y la Sila Vacía: Pero esto dista de lo que informa la Agencia Nacional de Tierras (ANT), según la cual serían 804.771 (casi el doble más) hectáreas formalizadas, producto de los actos administrativos expedidos, con corte al 9 de enero de 2024 (18 días después de la fecha de corte usada por el Ministerio)”. Que desfase y que mentira la de este Gobierno.

 

Para rematar, este Gobierno Petro que tanto habla del Cambio Climático (así sea para matonear al Gremio de Recursos Energéticos Fósiles), y que promueve métodos más amables con el Medio Ambiente y el Desarrollo Sostenible, está circulando con papel periódico tradicional, que es altamente contaminante, en vez de hacerlo cibernéticamente; para evitar que no solo se convierta en vertimiento del popó de las mascotas y de seres humanos, sino que termina convirtiéndose en basura que taponará alcantarillados, que se acumulará en los bosques haciéndole daño a la fauna y flora, ni hablar de su falso pregón en pos de la naturaleza. Pero como Petro quiere hacerse reelegir, a las buenas o a las malas, en 2026, ya quiere promocionar a los cuatro vientos su cantaleta de egolatría y politiquería tradicional (igualito a Álvaro Uribe). Y lo más patético; los primeros en hacer quedad a Vida como un ridículo, son los mismos integrantes de este Gobierno fallido y desorganizado (caso Panamericanos 2027), a través de sus metidas de pata en las Redes Sociales.

 

martes, 16 de enero de 2024

ESAS UNIVERSIDADES

 

Cuando la juventud culmina sus estudios escolares, en más del 90% de quienes la componen, tienen en sus planes ingresar a una universidad para cumplir sus propósitos de ser un profesional responsable, ético e independiente. Suena bonito en el papel, pero en Colombia muchos personajes avivatos se aprovechan de este tema para hacer de las suyas y satisfacer sus desaforados egos; en cualquier garaje, bodega o patio fundan un supuesto centro educativo superior, sin cumplir los mínimos estándares éticos y profesionales; solo se dedican a promover sus aspiraciones politiqueras y personales, tumbándole al estudiantado la plata que con sufrimiento tienen para sus estudios, llenándole la cabeza y el corazón de frustraciones y humillaciones. ¿Y qué hacen las autoridades encargadas de la materia? Prácticamente nada. Para la muestra, la Universidad Sergio Arboleda, en Bogotá DC, donde ha habido una docencia interesante como el otrora dirigente político Álvaro Gómez Hurtado; de esa alma mater salieron el Expresidente Iván Duque (célebre por su desgobierno y falta de coordinación, que llevó incluso, a podrir la Economía Naranja que tanto pregona) y el polémico Fiscal Show Francisco Barbosa (con Walfa incluida, célebre por su mediocre trabajo en el ente judicial, donde se ha dedicado a cubrirle la espalda a Carnitas y Huesitos en unos procesos que tiene pendientes); a la Sergio Arboleda, el apellido que la posee, Noguera, le ha dado unos golpes económicos, educativos y éticos que le han mermado su honorabilidad.

 

Otro ejemplo es la Corporación Universitaria de Colombia (Cuyo Presidente Emérito, un cargo solo de papel, es del Expresidente amigo de la Guerra, Álvaro Uribe Vélez). Aunque tiene un rector legal (Guillermo Hoyos), el poder y la tiranía son ejercidos por los Hermanos Moreno de Caro (Carlos (ExConcejal de Bogotá) y ExSenador de la República), Isaac (ExConcejal de Bogotá) y Marco), tratan como esclavos a todos sus subalternos, humillan y matonean a los estudiantes so cualquier pretexto, se ufanan de hacer lo que quiera porque supuestamente están protegidos, ¿por quién? Las denuncias por bullying y acoso de todas las formas, ya tiene varios expedientes en los Ministerios de Educación y Trabajo, sin que se hayan producido acciones contundentes para hacer justicia. Se suma el antecedente de la Universidad del Trabajo, fundada a finales del siglo pasado por el mismo Carlos Moreno de Caro, que, si bien ya no existe, también fue testigo muda de todas las bellaquerías cometidas contra estudiantes y subalternos por parte de esta casta politiquera. Y se supone, que con la alcahuetería que hay en Colombia, si a esta Corporación Universitaria la cierran, no tendrían problemas en fundar cualquier chuzo por ahí.

 

Un caso célebre es la Universidad San Martín, que pasó de ser un Centro Educativo Odontológico que se ubicaba en el sector norte de Teusaquillo en Bogotá, a un emporio universitario donde había carreras pregrado y posgrado por doquier, y en la mayoría de las regiones colombianas. El apellido Alvear ha estado muy ligado a esta alma mater (ahora con más presencia en el más allá que en el más acá), con sus consecuentes problemas de desfinanciación y pérdida de recursos, que iban a parar a las excéntricas vacaciones de los miembros de esta polémica familia.  Aparecían en los papeles como unos nobles inversores, cuando en realidad eran unos guaches desfalcadores de la misma, mientras que la parte educativa se iba cayendo poco a poco, la angustia empezó a apoderarse del personal docente, administrativo y estudiantil. Pero este no es el único caso de ofrecimiento de mentiras, la Universidad Indígena e Intercultural Jacinto Ortiz (Uniciao), ofrecía falsos programas de Medicina y Derecho sin la aprobación de Mineducación (como en muchas instituciones de garaje que hay en el país), a los indígenas, trayéndoles otra humillación y frustración.

 

Uno de los casos tristes más célebres de estas “Universidades de Garaje” es el de la Universidad Autónoma del Caribe, cuya Junta Directiva estaba encabezada por una Bailarina de Cabaret (Silvia Guette), por el solo hecho de “consolar” a un viudo (el dueño de este ente educativo). Incluso, el yerno del señor trató de denunciar las irregularidades que se presentaban desde la llegada de la cabaretera, pero tan solo recibió su muerte a principios de este siglo. Después de mucho tiempo en indagaciones y dilaciones, no ha habido mayores condenas y el proceso continúa en medio de archivos en los entes judiciales, aunque hay que destacar que la Señora Guette ya no se encuentra en el alma mater. La tocaya (Universidad Autónoma de Colombia, con sede en Bogotá) desapareció sin saberse exactamente porqué, ni siquiera una razón de sus directivas a estudiantes, docentes y personal administrativo. Y no solo hablar de la educación universitaria impartida por la derecha, la izquierda ha dejado al abandono la Universidad Incca (a punto de desaparecer). Ni hablar de la Universidad Distrital donde un Alto Directivo cogió la tarjeta de crédito corporativa para menesteres morbosos, la caída de la sede física de la Universidad Nacional sede Bogotá, ni de otras en problemas. Lo recomendable es que antes de ingresar a un centro universitario, cerciorarse de su situación y su legalidad.

martes, 9 de enero de 2024

DOS LIBROS

 

Terminando el año anterior y empezando el presente, el autor de la presente columna se dio a la tarea de leer dos libros que se consideran interesantes no solo por su temática, sino también porque hace remover los sentimientos más profundos en el corazón. No es que sea un experto en literatura ni escritor, pero sí gusta de leer una buena obra de vez en cuando, para no caer en la ignorancia de las fake news ni en los chismorreos del estrato mil, porque leer un libro es un deber de todo ser humano, para reflexionar sobre la vida y como se debe afrontar el futuro con base en un pasado que ya no es irreversible y un presente donde se deben elegir las mejores alternativas de vida. Y esta época es la más propicia para dedicarse a tan agradable menester, por cuanto ya las labores se aflojan un poco en vista de que ya la mayoría de los proyectos han sido desarrollados, además de que no todas las fiestas de fin de año son lo más indicado para dedicarse un poco de tiempo a sí mismo, sino para desintoxicar el cuerpo y el espíritu de todas las situaciones vividas a lo largo y ancho del año que termina, para recargar energías con miras al año que viene.

 

El Primer Libro es LO QUE NO TIENE NOMBRE, cuya autora es la autora antioqueña Piedad Bonnett. Se trata de un bello relato en homenaje a su hijo Daniel, fallecido hace 12 años, producto de una enfermedad que es mejor no mencionarla, por cuanto implica estigmatización social y un dolor familia irremediable. Esta edición de la obra por parte de Alfaguara, especial para conmemorar los primeros diez años de la obra, que incluye unas hermosas obras de arte por parte del joven, así como el relato de la autora a su dolor, que, si bien no se va, se asume como un reto para seguir adelante. Se puede leer las diversas situaciones de la familia y amigos frente a la tragedia, así como lo que originó esta situación y la forma en que se está afrontando. Este es un tema que puede ocurrir en cualquier familia, sin que se vuelva motivo de discordia o de estigmatización (hay que anotar que en la sociedad colombiana aún se recurre a esta práctica tan ruin para justificar comportamientos absurdos como el rechazo). Es un libro donde está expresado todo el amor de una madre frente a la tragedia que afrontó su hijo.

 

El segundo es nada más y nada menos que LA VORÁGINE, de José Eustasio Rivera (no es pariente del autor de la presente columna), que cumple 100 años de haberse escrito y presentado. En este caso, se eligió UNA EDICIÓN COSMOGRÁFICA, hecha a cuatro manos por las Antropólogas Margarita Serje y Erna Von der Walde, Antropólogas de Profesión y Docentes de la Universidad de los Andes. No solo se limitan al relato en primera persona hecho por Arturo Cova (en letras de Rivera) sobre su periplo por la Orinoquía y la Amazonía con su amada Alicia, ni las aventuras que tuvo que vivir Clemente Silva para recuperar los restos de su hijo Luciano, muerto en la manigua; también hacen un recuento sobre todas las ediciones que se hicieron de la presente obra, incluyendo mapas para hacer un exquisito estudio sobre la misma, con la primera parte de la última edición de la obra en 1929, a la cual se añadieron la cartografía hecha por el autor en ediciones anteriores. Posteriormente vienen unas experiencias escritas de varios expertos en la materia (Alexander Von Humboldt y Rafael Reyes), sobre sus viajes por la Orinoquía y la Amazonía, incluyendo una carta que el mismo José Eustasio le escribió a Henry Ford, para hacerlo reflexionar antes de que pusiera en marcha unas Colonias Caucheras.

 

Bien vale la pena decir que leer un libro no es ningún delito como lo quisieron imponer cierta mojigatería religiosa durante el siglo XIX y la primera mitad del siglo XX, y que, si bien aún no ha desaparecido este concepto peligroso, ya se puede expresar con orgullo cada vez que se ha superado el reto de leer cualquier obra literaria, así como que se haya entendido y asumido las lecciones de vida que dejan en el camino.  Para quienes creen que la ignorancia es la mejor aliada para imponer criterios e ideologías, les debe quedar claro el mensaje de que no se juega con un asunto tan delicado, que entre más se lea y se instruya, será mejor la conciencia política de cada ciudadano. El autor de la presente columna no es un experto en estas lides, pero si deja entrever la satisfacción que le produjo leer estas dos obras, así como llevar en mente los legados y las lecciones que le dejaron. Y por eso, insta a quien lea la presente, a que se tome un tiempo para leer una obra literaria y se mire luego al espejo.